Consultora y formadora especializada en Gestión, Dermocosmética, Marketing Digital y RRSS.
Colaboradora en Asun Arias Consultores.
Máster en Atención Farmacéutica Comunitaria por la Universidad de Valencia, Postgrado en Nutrición por la Universidad de Navarra, Especialista universitario en Ortopedia por la Universidad de La Rioja. Estudiante del Master de Salud Digital de la UOC.
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El Alzheimer es la enfermedad neurodegenerativa más frecuente, con 40.000 nuevos casos diagnosticados cada año en España, aunque se estima que entre un 30 y un 40% de los enfermos están sin diagnosticar.
Estoy segura de que conoces algún caso cercano en el que has comprobado como esta enfermedad se llevaba la memoria y los recuerdos del enfermo. A veces nos resulta difícil de comprender y de aceptar, sobre todo cuando se trata de un ser querido, porque el Alzheimer va mucho más allá de unos olvidos o de tener que repetir las cosas varias veces. El enfermo deja de conocer a sus familiares y olvida su historia, se desorienta, tiene cambios de humor y de conducta,… Es un proceso muy, muy duro, tanto para el propio enfermo como para sus familiares y cuidadores.
La aparición de pequeños olvidos o retrasos leves de memoria son habituales y parte del proceso de envejecimiento. Olvidar una palabra o el nombre de alguien, aunque es molesto, no es preocupante y suele estar relacionado además de con el envejecimiento con otras situaciones como el estrés o la falta de descanso. Pero cuando esos pequeños fallos en la memoria son cada vez más graves o frecuentes o si interfieren en las actividades de la vida diaria, debemos acudir al médico para que valore la situación.
Los primeros signos de la enfermedad de Alzheimer incluyen:
- Pérdida de memoria
- Problemas en el lenguaje. Dificultad para comunicarse
- Bajo nivel de energía
- Desorientación
- Incapacidad de resolver operaciones aritméticas sencillas
- Cambios en la personalidad y conducta
- Deterioro en la capacidad de movimiento o al caminar
- Cambios de estado de ánimo
- Pérdida de objetos
Síntomas de la enfermedad de Alzheimer (Fundación Pascual Maragall)
Consejos para el cuidado de un enfermo de Alzheimer:
- Pregunta, pregunta y pregunta. Cuanta más información tengas, mejor entenderás la enfermedad y lo que le pasa al enfermo. Puede ayudarte contactar con asociaciones de pacientes, centros de día y grupos de apoyo.
- Adáptate y adapta las tareas, aprovecha los momentos en está menos confundido para hacer las tareas más complicadas.
- Es muy importante cómo nos comunicamos con el enfermo, pincha aquí para ver unos consejos que os dejamos en otra ocasión.
- Facilítale que siga realizando algunas tareas, déjale todo organizado y preparado para evitarle más dificultades y que continue sintiéndose útil.
- Durante el día planifica actividades sencillas y no le fuerces a hacer cosas que no le gusten.
- A la hora de dormir procura mantener ciertas rutinas, un ambiente tranquilo antes de acostarse le relajará y le ayudará a conciliar el sueño.
- No dejes a su alcance productos o elementos peligrosos como medicamentos, productos de limpieza, cuchillos, tijeras, …
- Evita en la medida de lo posible las situaciones y los lugares extraños o con mucha gente pues suelen confundirles y agitarles
Si has sido o eres cuidador de un enfermo con Alzheimer nos gustaría conocer tu experiencia. Por favor, déjanos un comentario y cuéntanos algún truco o consejo que te haya ayudado.
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